Era un día normal para Juan, él estaba revisando las cadenas del ancla en el buque de carga en el que había trabajado durante a?os, era un trabajo rutinario.

  Pero hoy hubo un peque?o problema, notó que una parte del soporte estaba algo oxidada y lo reportó de inmediato con su radio.

  "Hola jefe aquí Juan, tenemos un problema con óxido en el soporte del ancla 2"

  "Copiado Juan, ?Qué tan malo es?"

  Juan se agachó y raspó ligeramente el óxido, desafortunadamente para él. Esto fue suficiente para que todo el mecanismo colapsara antes de que se diera cuenta una cadena de varias toneladas había destrozado todo su torso…

  Juan estaba sentado en una gran sala de espera de color blanco con sillas azules atestadas de gente, y en sus manos había un folleto que decía “?por qué estoy aquí?”

  Extra?ado decidió leerlo

  Juan algo perplejo por el impersonal volcado de información miró a su alrededor, aunque llamaban a una persona por nombre y apellido más o menos cada 2 minutos, la ridícula cantidad de personas hizo evidente que estaría allí por un largo rato, por lo que se dispuso a conversar con algunas personas en lo que toda la información se asentaba en su cabeza.

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  Después de 5 horas había conocido a mucha gente, había un equipo completo de aviadores militares cuyo avión que transportaba armas en una asignación de Black Ops tuvo un desperfecto en el motor y se terminaron estrellando en alguna parte de medio oriente.

  También se hizo amigo de tres camioneros que murieron en un mismo choque causado porque un perro se cruzó en la carretera.

  Y también de una chica aficionada a los trenes que se había puesto como meta personal hacer funcionar de nuevo una locomotora abandonada y transportar de su ciudad a un pueblo cercano un cargamento de locomotoras a escala…

  Al parecer nadie le dijo que las válvulas oxidadas no funcionan bien cuando se les aplica vapor a presión…

  Pero además de tanta gente interesante, había dos enormes grupos que resaltaba, en primer lugar, un grupo preocupantemente grande de jóvenes, principalmente asiáticos, que habían sido atropellados por camiones…

  Bueno, de alguna parte tenía que salir el cliché de camión-kun.

  Y el segundo era un enorme grupo de repartidores, que en muchos casos aún tenían esas mochilas cuadradas para llevar comida caliente.

  Una vez que estuvo más cómodo con su situación, decidió reencarnar,

  Por lo que fue a la página 4 de su folleto

  Justo en ese momento escucho que lo llamaban por su nombre y apellido.

  Emocionado por su nueva vida, se despidió rápidamente de los amigos que había hecho y corrió hacia la puerta de reencarnación, encontrando rápidamente un computador disponible, puso rápidamente su mano en el orbe, contestó la primera pregunta y se tomó su tiempo para escoger un mundo que le gustará.

  Escogió uno llamado Amandel, un mundo artificial al que llegaban reencarnados de todas las razas desde hace milenios. Se caracterizaba por tener un sistema como un HUD de videojuegos, simple y que funcionaba muy bien, Por supuesto, allí también había magia.

  El mundo estaba dividido en 2 situaciones.

  Núcleos urbanos mayoritariamente seguros que evolucionaban como cualquier ciudad, con caminos que los conectan formando una red que cubre gran parte de cada continente y también había algunos en el mar.

  Y en segundo lugar, las llamadas zonas salvajes. Estas zonas cambiaban constantemente alterando la geografía como mínimo una vez al a?o, esto se debe a que es un mundo dedicado al descubrimiento y la exploración, por lo que este es un seguro para que siempre haya lugares nuevos que explorar y cosas nuevas por descubrir.

  Al escoger este mundo él simplemente aparecería con el cuerpo y la edad que tenía cuándo murió, es decir, unos 25 a?os, Juan no quería pasar de nuevo por la pubertad...

  "Y finalmente lo más importante para un explorador en un mundo de fantasía, sus habilidades mágicas" pensó Juan

  La pantalla se llenó de opciones, Juan estuvo poco más de una hora pensando en combinaciones y alternativas, hasta que tuvo su set de habilidades perfecto.

  Como todo buen protagonista de isekay, lo primero que selecciono fue el espacio de inventario, completamente necesario para que un dragón no te mate mientras intentas correr con lo que casaste atado a tu espalda.

  Juan tocó “siguiente” para seleccionar su siguiente habilidad, pero la pantalla solo mostró una barra de carga, qué duro solo lo suficiente para que juan se extra?ará y volviera a revisar las instrucciones en su folleto.

  Tan solo alcanzo a leer "asegúrese de seleccionar todas las habilidades antes de poner continuar, ya que esto iniciará la reencarnación inmediatamente"...

  ???HOOO MIER...!!!!